Córdoba se abre a la Hemoficción

la primera frase sonó en todo el teatro y penetró en los oídos de los que estaban sentados en las butacas del teatro. Era la primera vez que sonaba mi vozactriz en mi ciudad. Entre las butacas estaba mi mamá. Una de las personas que más quiero. También dos hermanos, una cuñada, prima, tías y amigos de toda la vida. Era una especie de fiesta de cumpleaños, pero mejor.
Actuar en mi ciudad fue maravilloso. Calenté mucho la voz y el cuerpo y realmente gocé el escenario toda la obra.
Antes de la función estaba muy nerviosa. Pero al sonar la primera frase, todo vibró y el alma del teatro despertó y me llevó por esos lugares a los que sabe llevarme cuando me entrego completamente a la función.
Gracias Lorenzo Mijares, Gracias Juan Trigos. me han dado la vida.
Gracias Espacio tres 51 por abrirse a la Hemoficción!

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